El Dios Errante

Chapter 57: Capitulo 57



Poco después...

En medio de las calles oscuras de Japón, podría verse a tres figuras caminar a través de la noche tormentosa.

O bueno, dos figuras siendo casi exactos.

La ultima estaba en brazos de una.

Además, naturalmente estas tres figuras eran Kiiroi y Aoi con Yumeko en brazos como princesa.

¿Quien mas?

''Kiiroi, ya llevamos mas de media hora caminando, ¿donde exactamente dices que es el lugar seguro?'' Pregunto Aoi ignorando que toda su ropa estaba mojada hasta lo mas mínimo de su existencia.

A lo que Kiiroi solo señalo el lugar mas alejado.

Era la entrada a un bosque al pie de una montaña.

O al menos parte de el...

''¿En un maldito bosque?''

''¿Crees que un bosque nos mantendrá a salvo de esa gente?'' Pregunto Aoi con la cara torcida y molesta.

A lo que Kiiroi se limito...

A meterle tremendo putazo en la parte posterior de la cabeza, haciéndola casi caer.

''Te equivocas en algo, te mantendrá a salvo, a ti y Yumeko, yo puedo eliminar a esos bastardos con facilidad'' Explico brevemente haciendo que Aoi siseara de molestia y dolor.

Y vergazos de su hermana duelen como el infierno.

Así que se resigno a caminar junto a su hermana, metiéndose minutos después al mosque toda empapada junto a Kiiroi.

No mucho después de meterse terminaron llegando a la ladera de la montaña, esto dejo a Aoi con los ojos en blanco.

¿Que es esto ademas de suicidio?

Estando al aire libre no es diferente de quedarse en esa casa maltrecha.

Pero se quedo pendeja cuando Kiiroi la levanto del cuello de la camisa del suelo...

Junto a Yumeko en sus brazos.

Solo entonces Kiiroi camino como si este lugar fuera su casa, y repentinamente luego de caminar unos cuantos pasos, Aoi pudo ver como el espacio frente a ella se ondulo mientras lo atravesaban.

Solo para quedarse paralizada por lo que miro.

Frente a ella ya no estaba la ladera de montaña común y corriente.

Si no que frente a ella estaba un intrincado camino de piedra caliza, o lo que se miraba como piedra caliza brillante que iluminaba bellamente la lluvia que caía sobre ella.

Este se extendía hasta lo que daba la vista, parecía no tener fin.

Pero pronto abrió la boca tanto que casi se le disloca.

Ya que a lo que daba la vista valga la redundancia, incluso detras de ella, habia flores.

No flores comunes.

Eran flores azules.

Todas con pétalos brillantes y destellantes, todas sobre tallos verdes como el jade mas hermoso.

Pero lo mas extraño, es que de el tallo supuraba una sustancia azul que se mesclaba con la lluvia que caía en la tierra extremadamente verde y vibrante.

Solo que, incluso al sentir, porque si, ella sintió ese liquido desconocido, no le dio ninguna sensación de amenaza, aunque si le dio una sensación de rechazo.

Es como si su cuerpo lo rechazara por no estar preparada para el.

Ni siquiera ella sabia como sabia eso.

Pero aun así, solo pudo quedarse medio idiota cuando Kiiroi la dejo en el suelo y la dejo mirar los alrededores.

Incluso llego a retroceder, pero al final, ella no regreso a la ladera de la montaña, ella aun estaba en este jardín...

Asi que solo pudo volver su mirada a Kiiroi, quedándose de piedra cuando la miro quitarse la mascarilla.

Pero se quedo aun mas pendeja de lo que ya estaba sobrecargando su cerebro al ver que su hermana no cayo al suelo por eso.

Entonces Kiiroi hablo con tranquilidad mientras le indicaba avanzar.

''Esto, Aoi...''

''Es la Utopía soñada''

''Cada rosa azul significa algo imposible, algo investigado por cada ser en este planeta''

''Algo probado por cada ser''

''Algun anhelo hecho realidad''

''Los deseos mas profundos de cada ser''

''Cada desafío enfrentado por cada ser...''

''Hilos invisibles han conectado a todos volviendo su fe a este lugar''

''Este... Es el ultimo bastión de la antigua Terra''

''Un lugar que incluso los dioses nunca se atrevieron a tocar''

''Es creado a partir de la fe colectiva de todas las razas que existieron en la antigua Terra''

''Su primer maestro, se dice que vertió su alma en el''

''Con letras del dolor y océanos de amor...''

''Arropados en el, viven y coexisten ritos de poder''

''Ya sean recetas del vivir o hechizos del morir...''

''Ese maestro vertió todo de si...''

''Esto...''

''Es la Utopía de Elyseo''

''El Sanctum Elyseo''

''Hogar de las aspiraciones y los sueño...''

''Sin embargo...''

Kiiroi no termino de hablar quedándose en silencio.

Pasando algunos segundos antes de que ella decidiera hablar...

''Ahora esta Utopía que debió de ser eterna... esta vacía...''

''Incluso los espíritus del conocimiento... aquellos que saber recitar las formas mas intrincadas de espiritualismo... se han extinto...''

''Solo dejaron unas cuantas palabras talladas en el camino de la bella caliza blanca...'' Dijo Kiiroi mientras señalaba palabras ilegibles a los lados del camino de caliza.

Al menos ilegibles para Aoi.

''Llévame contigo al mas allá...''

''Que aquí no puedo dejar de llorar...''

''Llévame a otra realidad...''

''No quiero despertar...''

''Junto a ustedes, por fin podre olvidar...''

''Que la pena siempre fue mi hogar...''

''Llevame contigo... Sin ti, no puedo respirar...''

''Desearía estar siempre junto a ti...''

Tarareo Kiiroi mientras Aoi la miraba.

Ella estaba impresionada.

Kiiroi estaba mostrando expresión.

Era nostalgia.

O algo parecido.

Entonces pocos segundos después, Kiiroi tomo del hombro a Aoi con una suavidad que casi hizo a Aoi confundirla con otra persona.

Y lo hizo aun mas cuando escucho a Kiiroi decir palabras con un tono suave.

''No te separes... Sigue mis pasos sin rechistar'' Advirtio Kiiroi mientras pisaba el aparente aire.

Eso confundió por completo a Aoi, que aunque extrañada así lo hizo.

Pero sus ojos se dilataron cuando sintió algo solido debajo de su pie.

Entonces tratando de obtener una explicacion, se volvio a mirar a Kiiroi que solo le dijo una palabra.

''Después''

Solo entonces Kiiroi empez a subir la aparente nada junto a ella misma dejándola completamente atónita.

Y esto apenas comenzaba.

Ni bien empezaron a subir, Aoi pudo ver como una niebla azul visible flotando a lo que daba la vista.

Esta niebla se mesclaba con la lluvia y aparentemente caía hacia las flores.

Pero ademas de eso, la vista empezó a ser impresionante.

Sobre todo cuando las rosas soltaban luz para empezar.

Esto...

Era hermoso.

Y cuanto mas subían, mas hermosas se miraban las flores desde arriba...

Como si fuera un océano infinito atravesado por un camino de caliza brillante.

Entonces, sin darse cuenta de donde estaba, luego de mirar al frente nuevamente, se quedo estupefacta al mirar lo que las esperaba al final de la escalera.

Una hermosa casa bellamente creada de madera y adornos de cristal.

Pero lo que mas le sorprendio, es que obviamente la maldita casa estaba flotando en el cielo.

Y que esta aparentemente tenia luz, lo que significaba que tambien tenia algun tipo de focos para iluminar.

Entonces bajo la guía de Kiiroi, ambas entraron mientras la lluvia se desprendía de golpe de sus cuerpos dejándolas completamente secas y limpias.

Solo ahí sus ojos se adaptaron y casi hace que sus brazos suelten a Yumeko.

Pues lo que parecía ser una simple casa bonita, parecía una maldita mansión hecha de un interior de un mármol blanco brillante.

Aunque estaban en el vestíbulo, ver tal artesania solo aqui...

La hacia no poder cerrar su boca.

Y describiendo un poco, en el centro del vestíbulo habia una lampara colgante enorme que iluminaba todo el lugar.

Poco al frente del centro, habia unas escaleras que se bifurcaba para dar paso a un segundo piso.

Y ademas de eso, bajo esas escaleras que daban a un segundo piso, habían aberturas o como se llamen para pasar a otros lugares de la aparente mansion.

Pero pronto un apretón suave en sus hombros la devolvió a la realidad.

''Aoi, toma las escaleras y ve del lado derecho para dejar descansando a Yumeko, puedes tomar cualquier habitación del lugar''

''Puedes explorar todo, pero no te recomiendo... meterte en la biblioteca...''

''Además de eso, puedes esperar a que Yumeko despierte para explicar todo...'' Explico Kiiroi mientras iba debajo de la escalera izquierda sin mirar a Aoi que solo se crispo.

''¿¡A-A donde vas!?''

''A la cocina... ¿Donde mas?'' Dijo sin mirarla y desaparecer de la vista de Aoi a la cual le rugió el estomago.

Eso la hizo avergonzarse.

Tal parece que tambien tiene que ir con Kiiroi a estas horas.

Asi que rapidamente subio con Yumeko en brazos...

Al día siguiente en la ''mañana''...

''D-Donde... ¿Donde estoy?'' Se pregunto en voz baja Yumeko luego de pocos segundos de despertar.

*Blink*

*Blink*

''¿Por que todo es blanco?'' Se pregunto tallandose los ojos completamente desconcertada.

Aunque ciertamente no se pueda quitar las ojeras de los ojos.

Sabanas blancas y pulcras como la nieve.

Una mesita de noche tambien blanca con una lampara extraña, casi como una lampara de lava.

Las paredes tan limpias y lisas que incluso podía ver su reflejo en ellas.

Y una ventana con las cortinas cerradas.

Entonces ella se levanto lentamente y camino hasta la ventana, solo para abrirla y que casi se le salga el corazón.

Ni bien la abrió, la vista le dio vértigo extremo.

Ya que parece haber un mar debajo de ella y lo que daba la vista, ademas de verse muy alto obviamente.

Eso la hizo dar un paso atrás cayendo de culo al piso con una cara aterrada.

''¿¡A-Ah!? ¿D-Donde esta esto? ¿E-Este es el lugar donde van las almas que mueren?'' Se Pregunto estúpidamente levantándose mientras caminaba de forma nerviosa hacia la puerta de la habitación.

Abriendola un poquito y mirando por la rendija que dejo, por si acaso.

Pero lo unico que encontro es otra habitación o puerta delante de la suya, tan blanca y pulcra como la que ella misma estaba tocando ahora mismo.

Entonces al sacar la cabeza y mirar a sus lados, inmediatamente sus ojos se volvieron agujas cuando miro su lado izquierdo.

Habia un pasillo inmenso que ni siquiera ella podía ver el final.

Todo lleno de puertas y aun mas pasillos aleatorios.

Pero en cambio, al mirar a su derecha, habia un pasillo tranquilo que daba a unas escaleras bifurcadas...

Asi que salio con cuidado oliendo el aire.

Olía extraño.

Es como oler el roció por la mañana, o oler la tierra en un dia lluvioso.

Además, el silencio incomodo la hizo estremecerse por sus propios pasos.

Solo entonces, ella bajo por las escaleras mirando este vestíbulo.

Y solo ahi un olor extraño le asalto las fosas nasales.

Era olor a comida, la cual ni bien trato de reconocer su estomago rugió tanto que la hizo casi arrodillarse.

Pero pronto se recupero y siguió el olor a su derecha debajo de la escalera izquierda y camino durante algunos minutos pasando de habitacion en habitacion hasta llegar a una cocina...

En ella estaba cocinando su... ¿Hermana?

''¿Kiiroi?'' Pregunto en voz algo ladeando la cabeza, solo para que sus ojos se agrandaran.

Obviamente si estas en un lugar desconocido, nunca haras este tipo de cosas.

¿Pero ella iba y llamaba la atención de esa cosa que se parecía a su hermana?

No...

De hecho, si era su hermana.

Al momento en que se volteo a verla, esa cara de palo eterna la hizo reconocerla.

Además, Aoi tambien se estaba atiborrando de comida.

Eso la hizo poner una cara extraña.

Ella casi nunca hace eso... a menos que este nerviosa o tensa.

Pero rapidamente se sento al ver a Aoi señalarle una silla junto a ella.

Solo entonces pudo ver con los ojos confundidos a su hermana Kiiroi que pareció haber crecido al menos una cabeza de altura cocinar en una estufa enorme muchas cosas simultáneamente.

Ya fuera estuviera salteando verduras, champiñones, chiles.

O estuviera friendo pechugas de pollo o estuviera asando con tranquilidad pedazos de carne tranquilamente.

Era un desastre caótico que ella muy apenas podía procesar.

Y así estuvo mirando a Kiiroi cocinar ignorando el desastre nervioso que era Aoi, solo para que Kiiroi sirviera plato tras plato colocándolo en la gran mesa blanca.

Llenandola de múltiples platos fragantes y calientes, listos para ser comidos.

Sin embargo, antes de que pudiera preguntar siquiera algo, su hermana Kiiroi la ignoro por completo y ella misma empezó a comer luego de colocar múltiples jarras llenas de algo y múltiples vasos...

Eso la hizo mirar los platos frente a ella y tomar uno lentamente.

Aun recordaba las palabras que dijo a Aoi y Kiiroi...

No se sentía digna de comer en la misma mesa que ambas.

Pero mientras mas pensaba esto, repentinamente un instinto primitivo salió de su cuerpo.

Así que de inmediato tomo un plato y se lo empezó a comer.

Eso la dejo media tonta por un rato.

¿De donde viene esa amenaza que la hizo actuar de forma impulsiva?

Entonces trato de dejar de comer, pero la misma amenaza apareció de forma palpable haciéndola sudar.

Haciendo que ella comiera de forma obediente.

Media horas después...

''Ah~ Ya no puedo comer mas~'' Se quejo Aoi con baba saliendo de las comisuras de sus labios mirando al techo.

''No sabia que podias hacer comida tan buena~'' Siguió delirando mientras se sobaba el estomago.

Que por alguna razon seguía igual.

No es que tuviera el abdomen definido, pero al menos debería de verse un bulto ahi.

Pero esto fue ignorado por Yumeko que se encontraba mirando a Kiiroi que la miraba con su típica cara de piedra.

''¿Que es este lugar?'' Pregunto Yumeko, a lo que Kiiroi señalo a Aoi.

''Ella te lo puede explicar, pero no puedes salir de aquí a menos que yo te lo diga...''

''A meno que quieras caer tambien, este lugar funciona raro, ademas, no tengo tiempo para explicarles, nesesito encontrar y arrancar de raíz todos sus malditos problemas que llegaron a su puerta y yo termine siendo afectada'' Dijo Kiiroi levantándose mientras se estiraba.

''Estaré aquí como mínimo en cinco horas, ya tengo exactamente la ubicación de todos los involucrados en esto''

''Y de hecho, es sorprendente que hayas sobrevivido hasta ahora''

''Mas de cinco matronas te persiguen bajo las ordenes de Takao, y el bastardo sigue ordenes de Hoshino'' 

''Para empezar, ¿por que debe de existir aun un emperador que es controlado por otros? Un Emperador no merece llevar el titulo de emperador si no tiene las pelotas para suprimir todo debajo de el... Y el muy cabron tiene las pelotas para jodernos específicamente a nosotras'' Siseo con una cara molesta y con una vena palpitando en su sien.

Para entonces dejarlas y salir de la casa, dejando todo en silencio.

Si aun estaban en la cocina, pero la velocidad de Kiiroi cuando ni bien termino de decir esto, fue absurda.

Entonces Yumeko miro a Aoi que solo estaba delirando sobre lo buena que era la comida...

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